Recuerde que si no tiene sus propios florales, ya comienzan a aparecer en los viveros, los pensamientos, las violas, las prímulas y tagetes. Comience a planear sus futuros canteros.
Tome la medida del área perimetral y haga un diseño en papel cuadriculado. Divídalo en partes.
teniendo en cuenta que por metro cuadrado entran 36 florales anuales. Ponga un número a cada parte, correspondiente a las flores que elija. Verá fácilmente la combinación de colores y podrá calcular cuántas flores necesitará. Puede repetir la misma variedad.
1 - Allysum
2- Prímulas
3- Violas azules
4 - Violas amarillas
5- Copetes
Rosas. Se pueden hacer estacas. Se aconseja acortar los tallos y sostener bien las trepadoras, para preservar los rosales del viento fuerte.
Bulbos. Si no lo hizo en abril, todavía puede plan-lar tulipanes en el exterior; también azucenas, si el terreno no está muy frío y mojado.
Vigile constantemente los bulbos forzados en recipientes. Conserve su mezcla de tierra, húmeda. Cuando los brotes foliares tengan una altura de 2 ó 3 centímetros, puede sacarlos de la oscuridad como ya enseñamos.
Crisantemos. Ya en esta época han dejado de florecer. Corte sus tallos hasta pocos centímetros del suelo y levante con una horquilla las plantas madres. Limpie bien la tierra sobrante de las raíces; corte cualquier brote aéreo y aproveche para etiquetar (así clasificará bien las distintas variedades). Colóquelas en bandejas o cajas con compost, que mantendrá húmedo en el invierno.
Espere a la primavera. En este momento, aparecerán nuevos brotes que usted podrá utilizar, dejando de lado las plantas madres.
También puede usted dejar las plantas "in situ" y podarlas bien como la figura lo indica, para que vuelvan a desarrollarse.
Gladiolos. Cuando su follaje se deteriore:
1) levántelos con una horqueta, para no dañarlos. Si hay bulbillos alrededor de cada uno quítelos y guárdelos en turba seca, para plantarlos más adelante y reemplazar a los viejos.
2) Realice un secado rápido (es el secreto, para obtener bulbos sanos).
Puede usar 2 métodos:
a) Cuélguelos (fig. 9) y después quite los tallos hasta 2 ó 3 centímetros.
b) (el mejor )- Póngalos cerca de un secador de aire caliente, hasta que las escamas se sequen. Limpíelos y báñelos con funguicida. (Esto debe hacerlo en los 2 casos).
3) Guarde en bandejas con fondo de malla para que el aire circule. Si no tiene bandeja, envuélvalos en periódicos, sin apretarlos.
4) Colóquelos en lugar seco.
Herbáceas vivaces. Córtelas y remueva el suelo con cuidado, para no molestar las raíces. Elimine las malas hierbas.
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